El papa Francisco ha señalado que los pobres son quienes más sufren las consecuencias de las crisis ambientales, obligados a abandonar sus hogares debido a inundaciones, olas de calor o sequías.

En su video mensual de intenciones de oración para septiembre, el pontífice instó a la reflexión sobre el sufrimiento de las víctimas de desastres naturales y el dolor de "una Tierra que tiene fiebre", comparando el estado del planeta con el de un enfermo que necesita atención urgente.

Francisco subrayó la necesidad de respuestas integrales a las crisis ambientales, abarcando no solo aspectos ecológicos, sino también sociales, económicos y políticos.

Destacó la importancia de abordar problemas como el cambio climático, la contaminación y la pérdida de biodiversidad, señalando que estas cuestiones requieren una acción conjunta y decidida por parte de toda la humanidad.

El papa hizo un llamado a comprometerse en la lucha contra la pobreza y en la protección de la naturaleza, alentando a cambiar tanto los hábitos personales como los comunitarios.

"Oremos para que todos escuchemos con el corazón el clamor de la Tierra y de las víctimas de las catástrofes ambientales", concluyó, apelando a un compromiso activo para cuidar el mundo que habitamos.