EL analista Alejandro Dausá ofrece sus perspicaces observaciones sobre el reciente discurso pronunciado por Javier Milei. Dausá destaca varios puntos de preocupación, señalando un enfoque particularmente inquietante: la decisión de Milei de dirigir sus mensajes a la calle en lugar de al Congreso.

Dausá expresa su inquietud sobre si esta elección simboliza un desinterés hacia el Congreso o si sugiere intenciones más ominosas, como la disolución del órgano legislativo. Hace hincapié en declaraciones previas de ministros designados por Milei durante la campaña, quienes insinuaron la posibilidad de recurrir a decretos de necesidad y urgencia si las leyes no eran aprobadas en el Congreso debido a la falta de representación.

En cuanto al contenido del discurso, Dausá señala que, aunque no presenta muchas novedades, Milei utiliza cifras cuestionables y afirmaciones exageradas sobre la situación del país. Describe la necesidad de un "ajuste tremendo" que, según Milei, sacudirá los cimientos del país. Además, destaca un tono casi religioso al instar a la población a aceptar el sufrimiento presente en aras de un futuro supuestamente próspero.

Lamentablemente, el análisis de Dausá resalta la falta de medidas concretas anunciadas hasta el momento, así como la ausencia de discusión sobre temas cruciales como la soberanía nacional y las relaciones internacionales.

La incertidumbre persiste, ya que las medidas y anuncios esperados para este lunes aún no se han materializado. Dausá concluye su análisis expresando su impresión de que la situación parece improvisada, sugiriendo que Milei pudo haberse encontrado en una etapa de desconcierto tras su victoria electoral, reflejada en la elección de ministros con experiencia en gobiernos anteriores.

Por último, Dausá aborda la aparente falta de interés de Milei en las relaciones con los países vecinos y su priorización de vínculos con Estados Unidos. Advierte que estas actitudes pueden tener implicaciones negativas para las relaciones internacionales de Bolivia con los países latinoamericanos.