Este viernes, el Magisterio Urbano de Santa Cruz ha decidido suspender las clases en la mañana para participar en una marcha de protesta que recorrerá el centro de la capital cruceña. La movilización, convocada por el sindicato de docentes urbanos, exige la atención de una serie de demandas que afectan tanto a los maestros como a la educación pública en general. Entre los reclamos se encuentran: mayor presupuesto, asignación de ítems, mejoras en la infraestructura educativa, el alza de precios de la canasta familiar y el reciente conflicto por la falta de combustible.

Osmar Cabrera, uno de los líderes de la movilización, señaló que aproximadamente el 70% de los maestros participarán en la marcha. La concentración está prevista para las 10:30 en la sede de la Federación de Maestros Urbanos, en la calle La Paz, desde donde partirán hacia el centro de Santa Cruz.

Demandas urgentes.-

Las exigencias de los maestros son diversas y responden a problemas acumulados en el sector educativo. La falta de presupuesto y de ítems necesarios para cubrir las necesidades de las escuelas, el deterioro de las infraestructuras escolares, y el aumento de los costos de la canasta básica son algunos de los puntos críticos que han impulsado la protesta. Adicionalmente, el magisterio demanda ser incluido en el próximo Congreso Plurinacional de Educación, un evento donde se definirán importantes políticas educativas a nivel nacional. También exigen mejoras en la atención de la Caja Nacional de Salud (CNS) y la derogación de leyes que permiten las quemas, tema que también afecta a la salud pública y el medio ambiente.

Cabrera instó a los padres de familia a sumarse a la marcha, argumentando que las mejoras solicitadas benefician tanto a estudiantes como a docentes, y que el impacto de estos problemas es amplio. Además, anunció que los manifestantes portarán ollas vacías como un símbolo del encarecimiento de la vida y de los problemas económicos que enfrentan.

Debido a la crisis de combustible y la escasez de transporte público en la región, el Magisterio Urbano planteó a la Dirección Departamental de Educación (DDE) la posibilidad de adoptar una modalidad de clases virtual para garantizar el avance escolar. Esta alternativa, según los docentes, permitiría seguir con el cronograma escolar a pesar de las dificultades de movilidad en la ciudad. Sin embargo, la DDE aún no se ha pronunciado oficialmente respecto a esta propuesta ni ha emitido declaraciones sobre la movilización.