Después de una dolorosa goleada 4-0 contra Ecuador en Guayaquil, la selección boliviana, dirigida por Óscar Villegas, no tiene tiempo para lamentarse. Con el próximo partido contra Paraguay a la vuelta de la esquina, el equipo se concentra en recuperar el ánimo y las fuerzas para enfrentarse a los guaraníes este martes en El Alto. “No hay margen para amargarse”, aseguró el técnico de La Verde, quien sabe que la clave está en mantener el “fortín” de Villa Ingenio.

La derrota ante Ecuador dejó a Bolivia con una diferencia de goles negativa de -14, lo que le permitió a Venezuela superarla en la tabla con ambos equipos sumando 12 puntos. Es por eso que este partido es más que crucial: La Verde necesita imperiosamente los tres puntos para mantener vivas sus opciones de clasificar al Mundial 2026.

El técnico Villegas ha comenzado a ajustar el equipo, previendo cambios en la alineación. José Sagredo, suspendido tras su expulsión contra Ecuador, será una de las bajas más notorias. Además, Sebastián Álvarez abandonó la concentración por motivos personales. Sin embargo, se espera que regresen figuras clave como Luis Haquín, Marcelo Suárez, Carmelo Algarañaz, y Diego Medina, quienes son fundamentales para fortalecer la defensa y el medio campo.

A pesar de las goleadas recientes, el optimismo sigue siendo el motor. La hinchada de El Alto, que espera un estadio lleno, será un factor esencial para empujar al equipo hacia la victoria en un escenario que puede marcar el rumbo de Bolivia en las eliminatorias. El tiempo apremia, y esta revancha ante Paraguay podría ser la chispa que encienda el camino hacia el sueño mundialista.