Con el objetivo de transformar El Alto en una ciudad más verde, limpia y saludable, el Distrito 1 ha lanzado una ambiciosa iniciativa de reforestación que consiste en sembrar un total de 2.000 plantines hasta diciembre de este año. Este proyecto no solo busca embellecer la ciudad, sino también contribuir al cuidado del medioambiente y la recuperación de los espacios verdes que se han perdido a lo largo del tiempo.

La iniciativa comenzó en septiembre, con la llegada de la época de lluvias, y se extenderá hasta finales de diciembre. El plan incluye el sembrado de especies como malvas, verónicas y ligustros, que serán plantados en diferentes plazas, avenidas y zonas de alto tránsito del Distrito 1. Entre las áreas intervenidas ya se encuentran lugares como la avenida Tiwanaku, la zona Barrio Minero, la Plaza Chacarilla o del Periodista, la Plaza 405, y la avenida Panorámica, entre otros espacios clave.

Waldo Quispe, encargado de Áreas Verdes, informó que, hasta el momento, el 88% de las áreas verdes planificadas ya han sido intervenidas con la plantación de estos nuevos árboles y plantas. Además, se está llevando a cabo un trabajo de mantenimiento y cuidado de los plantines, que incluye tareas de limpieza y riego para asegurar el buen crecimiento de las especies sembradas.

Este esfuerzo de reforestación responde a un mandato directo de la alcaldesa Eva Copa, quien ha subrayado la importancia de revitalizar la vegetación en la ciudad para mejorar la calidad del aire y crear más espacios verdes donde los vecinos puedan disfrutar de la naturaleza. "Queremos que El Alto esté poblada de árboles, plantas y plantines que contribuyan a la oxigenación y el cuidado del medioambiente. Con este trabajo buscamos un pulmón verde para la ciudad, que nos brinde aire limpio y un entorno más saludable", expresó la autoridad.

La reforestación está siendo realizada gracias al trabajo conjunto entre los funcionarios del Distrito 1, la Secretaría Municipal de Agua, Saneamiento, Gestión Ambiental y Riesgos (SMASGAR), y la Dirección de Áreas Verdes. A través de este esfuerzo coordinado, se espera no solo aumentar la cantidad de áreas verdes, sino también sensibilizar a la comunidad sobre la importancia de cuidar el entorno natural de la ciudad y fomentar hábitos más ecológicos entre los ciudadanos.

El proyecto no solo tiene un impacto ambiental, sino que también fortalece el sentido de comunidad, al involucrar a los vecinos en las tareas de reforestación y mantenimiento de los espacios verdes. Con la siembra de 2.000 plantines, El Alto da un paso más hacia la sostenibilidad, ofreciendo a sus habitantes un lugar más limpio, saludable y agradable para vivir.